Muchos las adoran, otros las odian, pero lo que es indiscutible es que con las cocinas abiertas al salón se gana en amplitud en casa. Es un tema recurrente en el blog y del que no nos cansamos nunca de hablar, ni de buscar buenos ejemplos, las cocinas abiertas. La gente que las odia les […]

Muchos las adoran, otros las odian, pero lo que es indiscutible es que con las cocinas abiertas al salón se gana en amplitud en casa.
Es un tema recurrente en el blog y del que no nos cansamos nunca de hablar, ni de buscar buenos ejemplos, las cocinas abiertas. La gente que las odia les pone muchas pegas, pero la mayoría tienen fácil solución y preferimos fijarnos en los beneficios. Que si huelen o son sucias o ruidosas… el olor a comida nunca debería molestar, además, cuando por ejemplo vives en un sitio con cocina cerrada, hagas un bizcocho, un pollo asado o un pescado al horno olerá toda la casa durante unas horas, por muy potente que sea tu campana… pero es que es comida! no es mayor problema. En cuanto a la suciedad, tanto si una cocina es cerrada como abierta debe estar perfectamente limpia y ordenada en todo momento, no hay excusas. Y lo de los ruidos, puedo entender que moleste el lavavajillas o la campana extractora, esta última se usa poco tiempo y lavavajillas los hay tan silenciosos que ni te enteras… así que, lo que os digo, todo tiene solución y mejor fijarnos en las ventajas que son muchas:
La luminosidad y la amplitud se multiplican varia...