Asoman tiempos nuevos, ahora nos gustan las casas con personalidad, nada de seguir un estilo y listo, no no. Todo se acepta, las mezclas de estilos parece que quedan mejor acompañados que cada uno por su lado. Y como todo en la vida, lo que se queda antiguo vuelve a ponerse moda. Como por ejemplo este apartamento de estilo clásico renovado  que vuelve con fuerza, acompañado de su inseparable dorado.

Este apartamento cumple todo a la perfección. Techos altos con molduras tanto en marquesinas como en las paredes que quedan vestidas y llenas de elegancia. Destacando el suelo para el recibidor mármol en un juego de colores blanco y negro como, en el salón comedor un parquet y para el dormitorio una preciosa moqueta estampada, sin olvidar el baño que también se utilizó mármol blanco igual que el revestimiento. La abundancia de luz natural de la que goza este apartamento y una buena luz artificial (ya que goza de una bonitas lamparás de diseño más moderno) consiguen que la vivienda en sí este llena de vitalidad. Existen lámparas de todo tipo por toda la casa desde las famosas bolas colgantes de espejo de Tom Dixon, que se encuentran en la zona de comedor, como una lampara de araña francesa en el centro del salón.

Para el salón, que junto con la habitación es una de mis zonas preferidas, se optó por una bonita paleta de color blanco, negro y dorado. Los colores de la elegancia y en su justa medida, con una buena distribución creando un ambiente acogedo...