De este bizcocho de claras y nata lo que más me llamó la atención fue la forma en que se elabora, con una técnica casi inversa a lo habitual. Casi todas las masas de bizcocho y recetas similares empiezan batiendo la mantequilla con el azúcar, integrando los huevos uno a uno y luego los ingredientes secos para terminar. En este bizcocho, la mantequilla tiene que estar líquida y es el último ingrediente que se añade a la masa, en vez de huevos enteros son claras y casi cada ingrediente necesita de una elaboración previa por separado, antes de añadirlo a la mezcla final. Dicen que el orden de los factores no altera el producto, pero en repostería si, así que mi recomendación es que si no tenéis mucha práctica, no improviséis, porque entonces una receta puede terminar en algo que no se parece nada a la original, a pesar de estar usando los mismos ingredientes. Este bizcocho ha tenido mucho éxito en casa a pesar de ser tan sencillo, expresiones como jugoso, de buena textura, suave, con el aroma justo a naranja… entre otras cosas, es lo que he oído. No me deja de parecer curioso cómo, a pesar de […]
De este bizcocho de claras y nata lo que más me llamó la atención fue la forma en que se elabora, con una técnica casi inversa a lo habitual.
Casi todas las masas de bizcocho y recetas similares empiezan batiendo la mantequilla con el azúcar, integrando los huevos uno a uno y luego los ingredientes secos para terminar.
En este bizcocho, la mantequill...