Ahora que llega el invierno nada mejor que una decoración en blancos y neutros para que el interior se funda con el exterior. Refrescante en verano y cálido en invierno si se le aportan los toques naturales y neutros necesarios, el blanco es un color que nunca cansa y las decoraciones resultan siempre relajadas, limpias […]

Ahora que llega el invierno nada mejor que una decoración en blancos y neutros para que el interior se funda con el exterior.Refrescante en verano y cálido en invierno si se le aportan los toques naturales y neutros necesarios, el blanco es un color que nunca cansa y las decoraciones resultan siempre relajadas, limpias y ordenadas, como la de este piso sueco que os presentamos hoy.Es el estilo nórdico más radical podríamos decir (que no el único como muchos piensan, nórdico no es exactamente sinónimo de todo blanco), donde los materiales y las texturas importan mucho. El suelo y algunos muebles de madera maciza, textiles de fibras naturales en algodones, lanas o yute como en la alfombra y dejar paso a la luz natural se convierten en prioridades cuando se quiere decorar casi todo en blanco.Si tuviera que elegir una de las habitaciones de este piso de 70 m no sabría por cual decidirme, porque tanto el salón como el dormitorio o la cocina son simplemente perfectos, invitan a quedarse ahí y hacer cosas de casa, relajados, alejados del mundanal ruido. A ver si os gusta ¡feliz lunes! Vía: Alvhem
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