Por fin cambié las encimeras de la cocinaLas encimeras de cemento, el que fue posiblemente mi proyecto diy más desastroso hasta la fecha, desaparecen para dar paso a unas bonitas encimeras nuevas. El antes y después no tiene desperdicio El tiempo vuela y es que hace ya casi un año que renové mi cocina sin obras con la colaboración de Leroy Merlin.

Me encanta el resultado. Mi pequeña cocina me enamoró desde el primer momento (desde el primer momento que la reformé, claro, porque antes era un horror) pero hubo algo que nunca me gustó: las encimeras.

Las encimeras de la cocina eran de formica blanca, normales y corrientes. No eran para nada feas pero no estaban en muy buen estado así que, podeída por mi euforia diy, me empeñé en cubrir las encimeras con cemento, a pesar de que todo el mundo me decía que era una locura.
Pues, efectivamente, fue un poco locura. No porque el proyecto fuese descabellado, sino porque lo hice con prisas y cometí varios errores que os conté en este glorioso post de mis proyectos diy que salieron fatal.

A los pocos días la encimera empezó a deshacerse y unas semanas después tenía este aspecto:

Horroooooooor. Mick, que es el cocinillas de la casa, tenía un cabreo del quince. Utilizar una encimera que se deshace y que tiene un aspecto asqueroso por más que la limpies es la pesadilla de cualquier aficionado a la cocina.

Después de aguantar sus quejas, lamentos y telodijes con el rabo entre las piernas, decidí que er...