Corría finales del siglo XIX cuando el arquitecto S.J.W. Mons diseñó este chalé de Wilhelminapark en Haarlem (Países Bajos). Para su diseño, se inspiró en el estilo en el estilo de las casas y jardines. Antes de que el Studio Ruim lo reformada, el edificio actuó durante años como estudio de grabación. Para adaptarlo a la época actual, apostaron por el uso de materiales modernos y de diseño, como HI-MACS con la intención de revitalizarlo.
Lleno de detalles y rebosante de elegancia

La luz, que fluye a través de las ventanas de época y se refleja en el nuevo suelo de mármol blanco Arabescato, es lo primero que destaca al entrar en este magnífico edificio.  Todo ha sido diseñado con elegancia hasta el más mínimo detalle, comenzando por la notable lámpara arquitectónica en racimo que cuelga por el hueco de la escalera, desde el techo hasta la planta baja. Las jambas de las puertas de acero, de color verde oscuro, combinan con el camino de escalera de terciopelo, y una iluminación adicional, más moderna, se ha integrado perfectamente en la cornisa restaurada de época. En el centro del salón, se ha apostado por un gran mueble de roble con una estufa empotrada que conecta la cocina y la zona de estar. La chimenea está incorporada en la zona del salón, mientras que los armarios de almacenamiento se han creado al lado de la cocina.
La isla de la cocina de mármol Fiori di Bosco es una pieza espectacular, realzada con una creación asimétrica de acero qu...